Hace unos días te hablábamos de la Inteligencia emocional y describíamos las habilidades que Reuver Bar-On establecía para crear un modelo capaz de medir esta capacidad psicosocial.
Hoy detallaremos los factores que componen cada una de estas habilidades.
Factores que determinan la IE
Para cada habilidad, Bar-On establece un conjunto de factores a tener en cuenta en su análisis y medición:
Autopercepción
- Autoconcepto: Es decir el respeto hacia a uno mismo y la comprensión y aceptación de nuestras debilidades y fortalezas.
- Autoconciencia: o el reconocimiento y comprensión de nuestras emociones y la consciencia del impacto que éstas tienen en nuestros pensamientos y acciones.
- Autorealización: o nuestra disposición a mejorar de manera voluntaria y a perseguir objetivos importantes para uno mismo.
Interpersonal
- Empatía: ¿Somos capaces de reconocer, entender y valorar cómo se sienten los demás y de respetar sus sentimientos?
- Relaciones interpersonales: ¿Desarrollamos y mantenemos relaciones satisfactorias con los demás? ¿Sómos capaces de confiar y compadecernos de los demás?
- Responsabilidad social: Disposición a contribuir al bienestar de los demás, ya se trate de grupos de personas o de la sociedad en general.
Toma de decisiones
- Resolución de problemas: ¿Encontramos solución a problemas que implican emociones? ¿Somos capaces de comprender cómo influyen éstas en la toma de decisiones?
- Contrastar la realidad: ¿Conservamos la objetividad y logramos que las emociones no alteren nuestra percepción de las cosas?
- Control del impulso: ¿Controlamos o conseguimos retrasar un impulso o la pulsión de actuar, evitando decisiones impetuosas?.
Autoexpresión
- Asertividad: ¿Comunicamos nuestros de sentimientos, creencias y pensamientos abiertamente? ¿Podemos defender nuestros derechos y valores de una manera socialmente aceptable?
- Expresión emocional: ¿Expresamos nuestros sentimientos abiertamente?
- Independencia: ¿Dependemos emocionalmente de los otros o nos comportarnos de una manera libre y autónoma?
Manejo del estrés
- Flexibilidad: ¿Somos capaces de enfrentarnos a situaciones o ideas impredecibles adaptando nuestras emociones, pensamientos y comportamientos a éstas?
- Tolerancia al estrés: ¿Nos enfrentamos a situaciones difíciles creyendo que podemos manejarlas e influir en ellas?
- Optimismo: ¿Mantener una actitud positiva hacia la vida? ¿Conservamos la esperanza pese a las dificultades?
Próximamente te hablaremos de cómo influye la inteligencia emocional en el funcionamiento, la productividad y la consecución de objetivos de una empresa.
Si deseas que te ampliemos alguna información, quieres proponernos algún tema para futuros posts, o bien, quieres contarnos tu experiencia, te invitamos a dejarnos un comentario.