Hace unos días te hablábamos de la joya de la corona de la gestión de personal: la cohesión. Hoy seguimos ampliando nuestros conocimientos sobre este importante reto. En concreto veremos qué y cómo influyen diversos factores en su consecución.
Factores que influyen en la cohesión
Debemos partir de la base de que no hay una receta aplicable por igual a todos los grupos. Digamos que te vamos a dar los ingredientes, pero deberás ser tú quien determine las cantidades y el punto de sal.
Las personas
Si estás acostumbrado a trabajar en la gestión de personas sabrás que resulta de vital importancia el perfil de los integrantes de un equipo. ¡¿Quién no ha lidiado con la típica manzana podrida?! Todos sabemos que una única persona es suficiente para destruir la moral de un equipo. Por eso resulta de vital importancia:
A. Tratar de identificar estos “sujetos” en el momento de crear el equipo y, si se nos ha pasado por alto,
B. Actuar con contundencia e intentar que se corrija la conducta o bien prescindir del “sujeto” en cuestión. Siempre será preferible contar con un efectivo menos que tener un efectivo que resta.
Otro aspecto relacionado con la cohesión es el tamaño del grupo. Cuanto más pequeño es el equipo, mayor es la tendencia a que éste alcance la cohesión. No obstante, un equipo grande no debe hacer que tiremos la toalla. Eso sí, necesitaremos mucho más el resto de ingredientes.
El/la líder
Sin duda, la persona que asuma el liderazgo del equipo va a ser crucial. Nunca, nunca elijas un líder que pertenezca al colectivo del que hablábamos en el punto anterior. Si has visto el vídeo que te proponíamos en el post anterior, habrás confirmado que el liderazgo es algo que se obtiene del equipo a base de ganárselo y no por imposición ni mediante una placa en la puerta del despacho. Un buen líder va a ser la mejor brújula para llegar a nuestra meta: la cohesión.
El ambiente
El líder va a tener mucho que ver en este punto. Lograr un ambiente de trabajo agradable, participativo, donde fluya la comunicación y se fomente el respeto va a ser un ingrediente facilitador.
El proyecto
Las características del proyecto también van a influir en el grado de cohesión de nuestro equipo. Un proyecto atractivo, motivador, que suponga un reto para el equipo nos ayudará a que el equipo se una a su alrededor. En cambio, si el proyecto carece de estas características, de nuevo, nos va a resultar más difícil lograr la anhelada cohesión. Si está en tu mano, intenta que el proyecto permita obtener un logro —aunque sea pequeño— en el momento del arranque. Esto motivará al equipo y contribuirá a mejorar su autopercepción.
Y hasta aquí los amigos de la cohesión. Muy pronto te contamos sobre los enemigos.
Si quieres que te ampliemos alguna información, quieres proponernos algún tema para futuros posts, o bien, quieres contarnos tu experiencia, te invitamos a dejarnos un comentario.